Si tenemos algo de esperanza por tener un planeta próspero —o al menos un negocio próspero— se necesitará que todos hagamos lo que podamos con los recursos de los que disponemos. Esto es lo que nosotros podemos hacer.
En 2013, donamos el 100% de las ventas del Black Friday a organizaciones ambientales.
En 2011, publicamos un anuncio del Black Friday en el New York Times destacando el exceso de consumo.